Ahora que se acaba el tiempo, y la vida se va en un momento, quiero guardar un recuerdo, por mis amigos, por los momentos vividos, que nunca quedan en el olvido.
Gracias por las flores que me dais y no pedís nada a cambio. Gracias por vuestros gestos y todo vuestro amor infinito. En la mar esperan las olas, henchidas de suspiros y sueños.
Dos caras de una misma moneda, aunque sean cara y cruz, las dos tendrán siempre la misma luz. Dos árboles, dos senderos, que conducen al mismo destino, se juntarán en el camino, de la aurora de un nuevo sol. Dos historias que se escriben, con amor.